La Unión Europea lo tiene muy claro: para poner fin al chantaje ruso es necesario acelerar la transición energética a través de la electrificación y la generación de energía renovable. Una de las palancas principales para este acelerón será la Iniciativa Europea de Tejados Solares en la que está trabajando la Comisión Europea. Según sus estimaciones, las instalaciones de autoconsumo solar en tejado podrían proporcionar casi el 25% del consumo de electricidad de la UE. El objetivo es aumentar la capacidad de autoconsumo en tejado 19 GW este año y sumar hasta 58 GW de capacidad de aquí a 2025. ¿Y cómo lograremos estos objetivos tan ambiciosos?
Los paneles se convertirán en un electrodoméstico más de las casas europeas. Será obligatorio instalar paneles solares en los tejados en edificios residenciales nuevos a partir de 2029. Para edificios públicos y comerciales se adelanta la obligación a 2026 para nuevos edificios y a 2027 para edificios existentes. También se simplificará la obtención de permisos para que los consumidores no tengan que esperar más de 3 meses para empezar a ahorrar.
Compartiremos los beneficios de nuestra instalación de autoconsumo con nuestros vecinos y con nuestra comunidad energética. La Unión Europea se compromete a que los consumidores puedan ejercer el autoconsumo compartido, sin costes indebidos. Además, habrá una comunidad energética de energías renovables en cada municipio de más de 10.000 habitantes para 2025.
Se trata de una apuesta muy clara de la Unión Europea por el autoconsumo como una solución clave a la dependencia energética, pero también como una herramienta a los altos precios de la luz, ya que los consumidores verán ahorros directos en sus facturas.
España, el país con más horas de sol de Europa, pero con menos tejados solares que Bruselas
En España tenemos la oportunidad de ser líderes en el sector del autoconsumo solar, sin embargo, nuestro camino está lleno de piedras regulatorias. En su análisis sobre políticas para el desarrollo de autoconsumo en Europa, Climate Action Network Europe considera que España aprueba por los pelos la asignatura de autoconsumo y suspende en autoconsumo compartido y comunidades energéticas. El estudio, que ha analizado 11 países europeos, ha tenido en cuenta la gestión gubernamental, incentivos públicos y procesos administrativos.
El informe coincide con la CNMC en que los objetivos de nuestra Hoja de ruta de autoconsumo para el 2030 no son suficientemente ambiciosos. El escenario objetivo propone 9 GW de capacidad instalada en 2030, en el que el autoconsumo residencial contribuye con 2 GW. La realidad es que en 2022 ya contamos con casi 3 GW de potencia instalada de autoconsumo en España según datos de UNEF. Además, el autoconsumo residencial está experimentando un fuerte crecimiento debido a los altos precios de la luz y las ayudas públicas. Solo durante 2021 se instalaron 0,4 GW de capacidad en el sector residencial.
El informe de CAN también pone de manifiesto la alta carga burocrática de los procesos administrativos de autoconsumo. En España, el permiso de legalización de una instalación de autoconsumo puede tardar más de 6 meses. Y, en algunos casos, hasta puede ser denegada a criterio del técnico municipal por razones estéticas.
Los tejados solares en los hogares unifamiliares suelen tener una potencia de 3 kW (6 paneles solares), lo que corresponde a la potencia de un lavavajillas y una lavadora juntos. Además, según el MITECO, estas instalaciones cumplen las características de sencillez técnica y no afectación a elementos estructurales del edificio. Sin embargo, a pesar de su reducida potencia y su simplicidad técnica, las instalaciones de autoconsumo en tejado tienen que pasar por trámites administrativos engorrosos e injustificados.
España suspende en autoconsumo compartido y comunidades energéticas
El autoconsumo compartido ayuda a incentivar el desarrollo de las renovables en entornos urbanos, además de ser una herramienta clave para las comunidades energéticas. El autoconsumo compartido permite distribuir los excedentes de una instalación entre los consumidores próximos. De esta manera, un autoconsumidor residencial puede llenar todo su tejado de placas solares, así maximizando su porcentaje de energía auto consumida, y obteniendo mayores ahorros en su factura. En el caso de una comunidad energética, esta puede invertir en instalaciones solares en tejados estratégicamente ubicados y compartir los excedentes dentro de la comunidad. Menos instalaciones, pero mayor superficie del tejado ocupada.
En España, un autoconsumidor solo puede compartir sus excedentes con consumidores que se encuentren a 500 metros. Esta distancia imposibilita poder repartir los beneficios del autoconsumo entre barrios vecinos con diferentes estratos económicos, o en áreas en las que hay baja densidad de población, como ocurre en los entornos rurales.
Sin embargo, al cruzar cualquiera de las dos fronteras (ibérica o pirenaica) este límite aumenta como mínimo a 2 km, y hasta 20 km para altos voltajes. Parece que en Portugal y en Francia no existen las supuestas limitaciones técnicas de la red de distribución que parece que existen en España para aumentar este límite.
La otra barrera al autoconsumo compartido también tiene que ver con la distribución de energía. En España contamos con coeficientes de reparto estático, por lo que a la hora de repartir tus excedentes de autoconsumo, solo tienes la opción de establecer un reparto fijo de los excedentes, aunque sea distinto cada hora.
En Francia ya cuentan con coeficientes dinámicos, un reparto inteligente que se adapta a los datos reales de generación de las placas y de consumo de los vecinos, obteniendo un mayor aprovechamiento de los excedentes y un mayor ahorro para los consumidores.
Y finalmente, la falta de regulación de comunidades energéticas. La Comisión Europea acaba de remitir al Gobierno de España una carta de notificación formal por solo haber realizado la transposición parcial de la Directiva Europea 2019/944 sobre normas comunes para el mercado interior de la electricidad, que incluye la formalización de las comunidades energéticas, entre otras figuras.
Estas son algunas de las preocupaciones del sector solar español. El autoconsumo solar ayuda a reducir las facturas de los consumidores de una forma sostenida en el tiempo con energía producida localmente y no contaminante. España tiene el clima, el tejido empresarial y el interés de los consumidores, lo único que nos hace falta es un marco regulatorio acorde con los desafíos del presente.
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Menuda información tan capciosa. Mientras tanto los alemanes quemando carbón a todo trapo. El chantaje empezó con el golpe de estado de EEUU en Ucrania en el 2014
Muy bien ver las iniciativas de Europa, me parece genial, pero después vas a los ayuntamientos a solicitar permisos y demás, y todo tarda media vida, en particular en pueblos y zonas rurales, parece otro mundo…