«El principal desafío económico actual de la fotovoltaica radica en las altas tasas de interés y la sobreoferta de energía, que provoca más de 600 horas con precios de 0 €»

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Ansasol es una empresa española del sector de las energías renovables, especializada en la energía fotovoltaica.

Para conocer mejor la empresa, su modelo de negocio, y sus previsiones sobre el sector, pv magazine ha entrevistado a Tobias Greiling, cofundador y CEO de Ansasol.

Pregunta: Para comenzar, ¿podría explicarnos su modelo de negocio y estrategia de marketing, y cómo se ha adaptado Ansasol a la situación actual del mercado?

Respuesta: Nuestro modelo de negocio se centra en el desarrollo integral de proyectos de instalaciones fotovoltaicas, durante el cual gestionamos todo el proceso, desde la tramitación y el montaje hasta la puesta en funcionamiento y el mantenimiento de las plantas. Para ello hemos desarrollado un departamento especializado en I+D.

Desde 2020, la empresa ha diversificado sus actividades para incluir el hidrógeno verde en su cartera de trabajo, bajo su nueva marca Hydron, y así ampliar su oferta de servicios a la demanda actual del mercado. También participamos en acuerdos de compra de energía (PPAs) para asegurar la rentabilidad de estos proyectos, y la empresa se orienta a prácticas sostenibles en sus operaciones, en línea con el impulso global hacia las energías renovables.

 

¿Cuántos MW fotovoltaicos han instalado en 2024, y cuantos tienen planeados ejecutar en 2025? 

En 2024 se instalaron un total de 70,5 MW, 13,5 MW con la planta en Guillena Santos y 57 MW en Jerez de la Frontera, ambos con la intención de ser ejecutados. En 2025 está previsto el comienzo de las obras en Salamanca y Alcaudete, de unos 30 MW en total.

 

Y ¿cómo les fue en 2023?

La compañía sumó a lo largo de 2023 a su cartera de desarrollo 3 nuevos proyectos de energía fotovoltaica y 9 de hidrógeno verde.

En lo referente a energía fotovoltaica, los proyectos puestos en marcha por Ansasol en 2023 sumaron 114,3 MWp de potencia instalada y una producción anual aproximada de 191.570 MWh.

En cuanto al hidrógeno verde, los proyectos de la unidad de negocio de Hydron sumaron en 2023 una potencia de electrólisis de 350 MW y una producción de casi 45.000 toneladas de hidrógeno verde al año.

 

¿Qué tipo de partners, y clientes generales tiene Ansasol?

Los partners son empresas del sector y proveedores. Nuestros clientes como tal son fondos de inversión, empresas del sector, offtakers energéticos o de gases renovables.

Para inversores trabajamos con empresas como Huawei y Goodwe. Para módulos con marcas como Trina Solar, Suntech. En estructuras Schletter y Solar Steel.

 

Hablemos sobre instalaciones si le parece, ¿hay algún tipo de tecnología que recomiende más en las instalaciones, como HJT, PERC o TOPCon, y por qué? 

Normalmente, Tecnología cristalina Half-Cell, aunque todo depende del tipo de proyecto, y de que tipo de necesidades y requerimientos específicos se determina. Actualmente, la mejor tecnología en cuanto a eficiencia, durabilidad y resistencia es la HPBC. Si es un proyecto que se determine que puede haber sombras, intentamos utilizar la tecnología PERC, que tiene mayor tolerancia a las sombras y contaminación.

 

Sobre soportación y orientación, ¿qué tipo recomienda más? 

Desde Ansasol el tipo de orientación que más recomendamos y utilizamos es el ‘seguidor a un eje’. Este tipo de instalación es la que a día de hoy más se utiliza, debido a su mejor rendimiento y costes de ejecución. Si el terreno no es adecuado para este tipo de orientación debido a la orografía, nos solemos decantar por instalar un sistema fijo.

 

Bajo su punto de vista, ¿cuáles son los errores que más se suelen producir en las instalaciones, y como podrían solventarse? 

Especialmente en la instalación de la estructura que soporta los módulos fotovoltaicos, es fundamental garantizar que el terreno sea adecuado en términos de calidad. Si el terreno no reúne las condiciones necesarias, podrían ocurrir movimientos que afecten la estabilidad de la estructura del seguidor solar. En casos donde el diseño no contemple estas condiciones, la estructura puede sufrir daños, comprometiendo el funcionamiento adecuado del sistema. Por ello, es esencial que la estructura sea capaz de absorber ligeros movimientos del terreno.

Para lograrlo, es imprescindible realizar un estudio geotécnico detallado del terreno. Además, deben llevarse a cabo pruebas específicas por parte de la empresa encargada de la instalación del seguidor, asegurando que el diseño de la estructura se ajuste a las características del terreno.

 

¿Cuál es su opinión sobre el uso de sistemas de almacenamiento?

Los sistemas de almacenamiento son un componente clave para optimizar la eficiencia y estabilidad de las plantas solares, especialmente en un contexto donde la intermitencia de las fuentes renovables es un desafío para la red eléctrica. El almacenamiento permite almacenar el excedente de energía producida durante los picos de generación solar, lo cual no solo mejora la disponibilidad de energía renovable en momentos de baja producción, sino que también ayuda a estabilizar la red y facilita la integración de más energía renovable en el sistema energético.

 

¿Y sobre las comunidades energéticas, y de los sistemas con baterías virtuales? 

Estas son una solución real y cercana para el autoconsumo, al igual que las baterías virtuales que ayudan a compensar los excedentes que de otra manera el productor los perdería.

 

Volviendo a Ansasol, ¿a qué retos técnicos y financieros se suelen enfrentar en sus proyectos? 

Los principales retos radican en los aspectos ambientales y en lograr la convivencia armoniosa entre una actividad industrial y otra. Es fundamental que ambas actividades se complementen de manera eficiente, promoviendo la sostenibilidad y asumiendo un compromiso responsable con el entorno.

Por otra parte, el principal desafío económico actual radica en las altas tasas de interés y la sobreoferta de energía, que provoca más de 600 horas con precios de 0 €. Esta situación impacta gravemente en los modelos financieros, comprometiendo significativamente la viabilidad de los proyectos y su financiación.

 

Hablemos un poco sobre política, ¿le parece que está fallando el sistema de subvenciones?, ¿cómo podría implementarse para que llegue al cliente final?

Aunque se han destinado importantes fondos a través de los PERTE para proyectos de energías renovables y de hidrógeno verde, la burocracia y la lentitud en la tramitación de permisos son grandes obstáculos.

Para que el cliente final pueda beneficiarse de estas subvenciones, es fundamental simplificar los procesos administrativos y mejorar la accesibilidad a estos fondos. Esto implicaría un marco normativo más ágil y la creación de mecanismos de distribución de ayudas que sean más directos y menos complejos, permitiendo que las empresas puedan acceder rápidamente a los recursos necesarios.

 

Entonces, ¿qué políticas estatales deberían implementarse para atraer fabricantes y fomentar el desarrollo de la fotovoltaica en España?

El gobierno de España debería implementar políticas que simplifiquen y agilicen los trámites administrativos, creando ventanillas únicas para la tramitación de permisos y licencias, lo que aceleraría la ejecución de proyectos.

Asimismo, sería clave promover la formación y capacitación de mano de obra especializada, y facilitar el acceso a contratos de compra de energía (PPAs) que garanticen la rentabilidad a largo plazo de los proyectos fotovoltaicos.

 

¿Cuáles son de momento los principales retos para la distribución e instalación fotovoltaica en España? 

Los principales retos incluyen la ampliación de las redes de distribución y transporte, el desarrollo de soluciones eficientes de almacenamiento, y la promoción del consumo mediante la mejora de las interconexiones. Estos aspectos son claves para garantizar un sistema energético más robusto, sostenible y accesible.

 

Para concluir, ¿podría explicar qué desarrollo y evolución esperan para el 2025?

En los próximos años se espera un aumento significativo en la demanda de energía renovable, impulsado por el creciente interés de consumidores en reducir su huella de carbono, lo que llevará a una mayor adopción de sistemas de autoconsumo solar.

Además, la innovación tecnológica en paneles solares y sistemas de almacenamiento de energía continuará avanzando, mejorando la eficiencia y reduciendo costos, lo que hará que las instalaciones sean más accesibles y rentables.

A su vez, se prevé un fuerte crecimiento en proyectos solares a gran escala, tanto en instalaciones fotovoltaicas para abastecer a empresas como en plantas solares que contribuirán al desarrollo de infraestructuras energéticas nacionales e internacionales.

 

Y en cuanto a Ansasol, ¿qué proyectos tienen en mente para el 2025?

Para 2025 esperamos la conexión del proyecto Jerez Montealto de 50 MW, además de continuar con esfuerzo en los desarrollos actuales.

 

 

 

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