La planta solar de 1 MW instalada en una granja de producción de metano de la SCEA Robin, Société Civile d’Exploitation AgricoleSociété Civile d’Exploitation Agricole (Francia), ha recibido la aprobación del cuerpo de bombero y las aseguradoras por su nuevo sistema fotovoltaico en una cubierta de 8.000 m2. De acuerdo con la empresa, la planta cuenta con las avanzadas funcionalidades de seguridad necesarias para una instalación de este tipo cerca de la producción de metano, una sustancia altamente inflamable. La aseguradora Groupama Rhône-Alpes-Auvergne explicó que desarrolla especificaciones y recomendaciones para minimizar los riesgos en edificios, granjas y centros de producción.
Las actividades de SCEA Robin incluyen la cría de cerdos, el cultivo de cereales y la producción de metano. Para contrarrestar sus elevados costes energéticos, la empresa instaló su primer sistema en el tejado en 2020 con una instalación de 100 kW destinada exclusivamente al autoconsumo. Tras comprobar la viabilidad económica de esta primera inversión, la empresa ha decidido ahora ampliar la planta fotovoltaica, alcanzando una nueva capacidad de producción total de 1 MW.
Aproximadamente una cuarta parte de la energía solar producida se utiliza para autoconsumo, mientras que el resto se vende a la red creando una fuente de ingresos totalmente nueva para la empresa. Desde que pasó a este modelo de doble uso de la energía solar, SCEA Robin informó un ahorro aproximadamente de un 18% al año en sus facturas.
La solución optimizada en corriente continua (CC) de SolarEdge combina inversores fotovoltaicos con optimizadores de potencia. Además, incorpora la función SafeDC que lleva automáticamente el sistema FV a 1 V siempre que se desconecta el inversor o la red, gracias a la funcionalidad de rapid shutdown (apagado rápido) que, según la empresa, permitiría una intervención segura durante el mantenimiento y en caso de emergencia.
También se incluye un sistema de protección integrada contra fallos de arco, que detecta e interrumpe posibles arcos. La detección e interrupción de fallos de arco no son obligatorias según la normativa francesa, pero las compañías de seguros las solicitan habitualmente. Los inversores SolarEdge incluyen esta protección, diseñada para mitigar los efectos de los arcos que pueden suponer un riesgo de incendio.
En el caso de SCEA Robin, el instalador de Planète+ puede monitorizar el sistema desde remoto a nivel de panel para identificar con precisión cualquier problema y resolverlo con rapidez, reduciendo el tiempo in situ y maximizando el tiempo de funcionamiento del sistema.
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