Los recursos del planeta no son ilimitados; se están agotando y por eso es más necesario que nunca llevar un estilo de vida sostenible para asegurar el futuro de las nuevas generaciones. Aunque pueda parecer un desafío, hay muchas formas de reducir nuestro impacto ambiental y contribuir a un futuro más sostenible para todos.
POWEN, compañía líder en el autoconsumo energético a través de instalaciones solares fotovoltaicas, explica a través de esta guía, cómo empezar a llevar una vida más respetuosa con el medio ambiente introduciendo pequeñas acciones en nuestro día a día:
- Reducir el consumo de energía y agua: apaga los electrodomésticos y las luces cuando no los estés usando; es un gran gesto para ahorrar energía. También puedes considerar la instalación de paneles solares en tu hogar; una alternativa, sin duda, muy eficiente y sostenible que se verá reflejada en tus facturas de la luz. Además, no dudes en reparar lo antes posible cualquier fuga que te haga perder agua y en emplear electrodomésticos y dispositivos que sean eficientes en el uso de estos recursos.
- Disminuir el consumo de alimentos de origen animal: la producción de estos alimentos tiene un gran impacto en el medio ambiente, por eso, reducir el consumo de carne y productos lácteos puede ser un gesto vital para el planeta.
- Apostar por la moda sostenible: la industria textil y, especialmente, el fast fashion (fenómeno por el cual se introducen colecciones de ropa que siguen las últimas tendencias de la moda y que han sido diseñadas y fabricadas de forma acelerada y a bajo costo) tienen un enorme impacto ambiental y social. Para huir de ello, elige prendas de segunda mano o que hayan sido producidas de manera responsable, con materiales orgánicos y reciclados y a través de procesos de producción más éticos. Además, estarás fomentando la economía circular si le das una segunda oportunidad a aquella ropa que ya no te pones, vendiéndola o modificándola para volverla a usar.
- Comprar productos de kilómetro cero o ecológicos: apoya a los productores locales y reduce la huella de carbono de tus alimentos comprando productos de temporada y locales. Además, otras alternativas como los productos con etiqueta o sello ambiental pueden ser una buena opción, pues su impacto en el planeta es reducido a lo largo de su ciclo de vida. Antes, el precio o la falta de disponibilidad de ciertos productos eran barreras importantes que impedían a los consumidores hacer una compra más sostenible. Ahora, un consumo responsable a un precio aceptable es posible.
- Utilizar medios de transporte sostenibles: camina, utiliza bicicleta o transporte público en lugar de conducir un automóvil. Así reducirás las emisiones de CO2.
- Emplear productos reutilizables para reducir el consumo de plástico y de papel: evita los productos de plástico de un solo uso y busca alternativas más sostenibles como bolsas y botellas reciclables y reutilizables. Asimismo, imprime solo cuando sea necesario y gestionar todo aquello que se pueda a través de correos electrónicos. Con este gesto no desperdiciarás tanto papel y aportarás tu granito de arena a la conservación de nuestros bosques.
Tus actos dejan huella en el planeta, y como cada gesto cuenta, súmate a una vida sostenible con estos sencillos pasos.